La Justicia Argentina encontró cientos de documentos y fichas de afiliación a organizaciones nazis en cajas resguardadas en el archivo de la Corte Suprema.
El hallazgo histórico tuvo lugar en el subsuelo del Palacio de Tribunales, donde funcionarios judiciales encontraron doce cajas de madera con material vinculado al nazismo, que habían permanecido allí desde 1941.
El descubrimiento se produjo en el marco de las tareas de reorganización del archivo de la Corte Suprema para la puesta en marcha de un museo institucional.
Las cajas, que originalmente contenían botellas de champagne Crillón, estaban llenas de pasaportes, fichas de afiliados al partido nazi, libretas de organizaciones gremiales alemanas y numerosa propaganda destinada a expandir la ideología de Adolf Hitler en la Argentina y América Latina.
Según pudo reconstruirse a partir de documentos históricos, el material ingresó al país el 20 de junio de 1941, a bordo del buque japonés Nan-a-Maru, y fue enviado por la Embajada Alemana en Tokio. Declarado como “efectos personales”, el contenido fue retenido por la Aduana debido a su volumen y naturaleza sospechosa.
La Embajada Alemana en Buenos Aires exigió su liberación, pero el Canciller de entonces, Enrique Ruiz Guiñazú, ordenó frenar el despacho ante el posible conflicto diplomático. La Comisión Especial Investigadora de las Actividades Antiargentinas, presidida por el diputado Raúl Damonte Taborda, tomó intervención y, tras revisar algunas de las cajas, detectó contenido “antidemocrático y lesivo para naciones con las cuales Argentina mantenía relaciones normales”.