Científicos inventan una radiosonda reutilizable, que protege el medio ambiente reduciendo 48 toneladas de residuos electrónicos anuales.
El invento denominado “airXeedb Radiosonde” busca revolucionar la industria de la predicción meteorológica mediante un enfoque sostenible y respetuoso con el medio ambiente.
Este invento fue diseñado por Shane Kyi Hla Win y Danial Sufiyan Bin Shaiful de Singapur, este dispositivo reutilizable fue inspirado en la naturaleza, específicamente en el sistema de caída de las semillas de arce, para reducir los residuos generados por las radiosondas meteorológicas tradicionales y ofrecer una alternativa eficiente y económica.
Las radiosondas meteorológicas son fundamentales para la recopilación de datos atmosféricos esenciales, como temperatura, presión, humedad y velocidad del viento en diferentes altitudes. Sin embargo, las radiosondas actuales son de un solo uso y, tras su lanzamiento, terminan convirtiéndose en residuos plásticos y electrónicos. Se estima que diariamente se lanzan más de 2.500 radiosondas en todo el mundo, con un costo anual de US$190.000.000 y la generación de aproximadamente 48 toneladas de residuos electrónicos. Este impacto ambiental es un desafío para el sector, especialmente en un contexto donde la precisión en la predicción meteorológica es cada vez más demandada por sectores como la agricultura, la energía y el transporte.
El diseño de la airXeed Radiosonde se basa en la autorrotación natural de las semillas de arce, que les permite caer lentamente y dispersarse eficazmente. Inspirados por esta adaptación, los creadores de airXeed desarrollaron una radiosonda que gira en espiral durante su descenso, emulando el movimiento helicoidal de las semillas. Esta tecnología de autorrotación pasiva permite un descenso más suave y controlado, minimizando el riesgo de daños y aumentando la posibilidad de aterrizar en puntos de recogida designados. Gracias a esta tecnología, airXeed puede recoger datos tanto durante el ascenso como en el descenso, mejorando la calidad y cantidad de la información atmosférica obtenida.
En línea con el compromiso ambiental, airXeed fue fabricado utilizando madera de balsa y espuma en lugar de materiales plásticos convencionales. Estos materiales no solo son más sostenibles, sino que también reducen el peso del dispositivo, lo cual mejora la eficiencia del vuelo y minimiza los costos de lanzamiento.
El proceso comienza cuando el globo que transporta la radiosonda asciende hasta unos 30.000 metros de altura. Una vez que el globo estalla debido a la baja presión atmosférica, la radiosonda comienza a descender. A diferencia de las radiosondas tradicionales, que utilizan paracaídas que pueden enredarse, airXeed desciende en modo de autorrotación, controlada por un sistema de inteligencia artificial que ajusta su velocidad y dirección según las condiciones del viento.
La recolección de datos en ambas fases de vuelo proporciona un perfil más completo de las condiciones atmosféricas, ayudando a mejorar la precisión de los modelos meteorológicos. Además, el diseño modular de airXeed facilita el reemplazo de componentes desgastados, promoviendo la durabilidad y reduciendo el desperdicio a largo plazo.