El Gobierno Nacional confirmó que la Argentina no presentará su candidatura para integrar el Consejo de Derechos Humanos de la ONU en el próximo período.
La medida, que implica el retiro del país de este organismo internacional, fue comunicada oficialmente a las representaciones argentinas ante Naciones Unidas y se enmarca en la decisión de reducir la participación en distintas agencias del organismo multilateral.
Fuentes de la Casa Rosada señalaron que la instrucción ya fue transmitida al representante argentino en la ONU, Francisco Tropepi, y que deberá llegar a la delegación en Ginebra encabezada por Carlos Foradori. La resolución marca un quiebre en la política internacional de la Argentina, que había tenido una activa participación en el Consejo de Derechos Humanos desde la recuperación democrática.
La decisión del Ejecutivo argentino se alinea con la postura del Presidente de EEUU Donald Trump, quien en febrero pasado dispuso el retiro de su país del mismo consejo. En esa oportunidad, también Israel abandonó el organismo, con fuertes críticas de su Primer Ministro, Benjamin Netanyahu, que acusó a la agencia de “propagar antisemitismo”.
El Consejo de Derechos Humanos, con sede en Ginebra, está compuesto por 47 Estados miembros que son elegidos por la Asamblea General de la ONU para mandatos de tres años. Argentina, que en varias oportunidades ocupó un asiento dentro de este cuerpo, no volverá a presentarse este año, en línea con la política de Milei de marcar distancia con las instituciones internacionales, una estrategia que ya había aplicado en febrero con el retiro de la Organización Mundial de la Salud (OMS).