A veces la heladera puede perder agua, este es uno de los problemas más frecuentes y puede llegar a estropear los alimentos.
La heladera pierde el agua que se acumula en los cajones o en el fondo y comienza a aparecer en el piso. También, suele suceder que se produce condensación de agua dentro del electrodoméstico, o aparece hielo en el congelador.
Esto se debe a las siguientes causas:
Bloqueo en el agujero de drenaje: Esta es la razón más común de la presencia de agua en la heladera, el bloqueo del agujero de drenaje, que es la entrada al circuito que conduce el agua hacia la bandeja de evaporación o goteo.
Es el orificio que tienen todas las neveras en la parte de abajo, al lado de la pared trasera. Para evitar esto es necesario limpiar el conducto utilizando un cotonete y un poco de agua (no demasiada).
Grietas en la bandeja de goteo: Este problema es mucho menos común, pero puede suceder que la bandeja de goteo que está situada en la parte inferior de la nevera puede agrietarse y provocar una fuga de agua.
La puerta no cierra bien: Otro problema que se puede encontrar es que haya condensación de agua en la heladera.
Esto provoca que entre más aire caliente del que debería al interior del refrigerador y que se produzca esa condensación de agua, por lo que es necesario cambiar el imán de puerta de la heladera.
Otro de los motivos más frecuentes de pérdida de agua en la nevera es el fallo provocado por el sistema de descongelación automática, que se encarga de eliminar el hielo acumulado en el interior del frigorífico. En ocasiones, puede generar fugas de agua que provoquen a su vez condensación y pérdidas de líquido.
Si el problema se debe al sistema de descongelado automático, lo mejor será acudir a un técnico del servicio especializado.