La espermidina es un compuesto natural se encuentra en nuestro organismo y también en diversos alimentos.
Este compuesto puede desempeñar un papel importante a la hora de ayudarnos a envejecer mejor, mantener nuestras células en buen estado e incluso contribuir a la salud del cerebro y el corazón.
Los científicos denominan “poliamina” a la espermidina, que existe de forma natural en todas las células del organismo. Contribuye a procesos celulares cruciales como el crecimiento celular, la reparación y el reciclaje de fragmentos celulares dañados a través de un mecanismo denominado autofagia.
La autofagia es un mecanismo mediante el cual las células eliminan componentes dañados o innecesarios, lo que ayuda a prevenir enfermedades como las cardíacas, metabólicas y neurodegenerativas. Este proceso es tan vital para la prolongación de la vida, que le valió al científico Yoshinori Ohsumi el Premio Nobel de Medicina en 2016.
El germen de trigo es el alimento más rico en esta molécula, con 350 mg/kg, y se recomienda consumirlo como complemento. Por su parte, las verduras verdes como el brócoli, los guisantes y los pimientos también son fuentes importantes. El brócoli, por ejemplo, contiene 100 mg/kg de espermidina y ofrece beneficios adicionales como la protección de la vista y el fortalecimiento de los huesos.
Otros alimentos que contienen espermidina incluyen los cereales integrales como el arroz, el maíz y el mijo, así como las legumbres, especialmente la soja y sus derivados como el tofu y el tempeh. De igual modo, los quesos curados y los hongos, también son buenas fuentes. En cuanto a las frutas, las peras y los pimientos verdes frescos son recomendables, mientras que los pomelos y las naranjas contienen principalmente putrescina, otra poliamina.