El NAD (Nicotinamida Adenina Dinucleótido), es un tratamiento para potenciar la longevidad, y que se ha vuelto tendencia entre los famosos.
El NAD es una coenzima que se encuentra en todas las células del cuerpo humano y desempeña un papel clave en la producción de energía celular. A medida que envejecemos, los niveles de NAD disminuyen, lo que afecta a varios procesos biológicos.
Diversos estudios sugieren que al aumentar los niveles de NAD en el cuerpo, se podría ralentizar el envejecimiento celular y mejorar la regeneración de la piel.
El NAD juega un papel fundamental en varios procesos biológicos clave, y su impacto en la salud de la piel está relacionado con su capacidad para mejorar la función celular, reparar el ADN dañado y potenciar la longevidad celular. Uno de los principales beneficios de aumentar los niveles de NAD es la mejora en la regeneración de la piel.
La regeneración celular es esencial para mantener una piel joven y saludable. El NAD ayuda a reparar el daño del ADN, lo que puede reducir la aparición de arrugas y líneas finas al fortalecer las células de la piel. Este proceso, al aumentar la renovación celular, da lugar a una piel más firme y tersa.
El NAD, a través de su efecto sobre las sirtuinas (enzimas clave que regulan la longevidad celular), puede ayudar a restaurar parte de esta elasticidad, lo que se traduce en una piel más flexible y menos propensa a flacidez.
Las clínicas de longevidad ofrecen infusiones intravenosas semanales o quincenales y cada sesión cuesta cientos de dólares, y las tiendas minoristas venden pastillas, para tomar a diario o semanalmente, a partir de unos US$20 al mes. Algunas utilizan el propio NAD+, mientras que otras utilizan precursores u otras versiones de la molécula.
