La Agencia Espacial JAXA, informó que el módulo lunar SLIM (Smart Lander for Investigating Moon) logró sobrevivir a la noche lunar luego de dos semanas de estar apagado.
En un comunicado en redes sociales, la Agencia Espacial JAXA, expresó que, “durante la noche enviamos una orden, a la cual SLIM respondió. SLIM ¡Logró sobrevivir a la noche lunar y mantuvo su capacidad de comunicación!”.
El módulo SLIM llegó a la luna el 20 de enero a 55 metros de su objetivo inicial, lo que supone un altísimo grado de precisión. De esta forma, Japón se convirtió en el quinto país que logra posarse con éxito en la luna, después de Estados Unidos, la Unión Soviética, China e India.
Pero debido a un problema motor en los últimos metros de su descenso, SLIM se posó de forma inclinada y sus células fotovoltaicas orientadas hacia el oeste no recibían luz solar.
SLIM aterrizó en un pequeño cráter de menos de 300 metros de diámetro, llamado Shioli. Antes de apagarse, el módulo pudo descargar con normalidad sus dos minivehículos, cuya función es analizar las rocas procedentes de la estructura interna de la Luna.
Las comunicaciones “se interrumpieron poco después, ya que todavía era mediodía lunar y la temperatura de los equipos de comunicaciones era muy alta”, precisó la Agencia Espacial.
“Se están llevando a cabo los preparativos para reanudar las operaciones una vez que las temperaturas de los instrumentos se hayan enfriado lo suficiente”, añadió el comunicado.
Cabe recordar que Japón tuvo dos intentos de aterrizaje lunar que fracasaron. El primer intento fue en el año 2022, cuando una sonda de la JAXA, Omotenashi, transportada en la misión estadounidense Artemis 1, registró un fallo de sus baterías poco después de ser lanzada al espacio.
El segundo intento fue en abril del 2023, la empresa Ispace intentó convertirse en la primera firma privada en llegar a la luna, pero perdió la comunicación con su nave después de un “aterrizaje forzoso”.
